Devoré esta novela, es altamente adictiva, no puedes dejar de leer, y si, es de mi estilo.
Ellen Roth es una joven psiquiatra que trabaja en la clínica El bosque, un hospital psiquiatrico, vive con Chris también psiquiatra y compañero de trabajo. Chris se va de viaje con un amigo a una isla de Australia, antes de emprender el viaje, Chris le deja el caso de una mujer sin nombre, con signos de haber sido maltratada y muy asustada y con voz infantil que le confiesa que su agresor es el hombre del saco, que es muy malo y muy astuto, y que irá a por ella también. Ellen se queda realmente impactada de esta mujer, que no tiene identidad, pero lo más inquietante está por llegar.
A la mañana siguiente cuando va hacer su ronda descubre que la mujer misteriosa no está, las ventanas están abiertas, al final los temores de la pobre mujer se hacen realidad, el hombre del saco se la ha llevado, los archivos del caso han desaparecido y lo peor de todo, que solo ella y Chris han visto a esa mujer, nadie más la ha visto.
Comienza una carrera para averiguar quien es esa mujer, y quien es el hombre del saco, este se pone en contacto con Ellen, no sin antes darle una buena paliza para que sepa a que atenerse si no sigue el juego que él le propone, además de amenazarla en matar a la mujer sin nombre.
Un puzzle con un montón de piezas que desconciertan tanto a la protagonista como al lector, pero al final todas las piezas encajan.
Es una novela muy original, nada predicible, con unos giros impresionantes que te dejan sin aliento y sin poder parar de leer, en momentos es angustiosa, por que tienes al hombre del saco muy cerca pero sigue estando lejos.
Muy recomendable, sobre todo si te gustan las novelas de terror psicologico, a mi me ha entusiasmado, de hecho el final me dejó un regusto en el cuerpo, es una novela que no es fácil de olvidar, interesante, intrigante y con un final espectacular.
